20 May Uso racional de los medicamentos
“Los pacientes reciben la medicación adecuada a sus necesidades clínicas, en las dosis correspondientes a sus requisitos individuales, durante un período de tiempo adecuado y al menor coste posible para ellos y para la comunidad”. (Definición del uso racional de medicamentos. OMS, 1985).
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se fomenta el uso racional de los medicamentos cuando «los pacientes reciben la medicación adecuada, tanto en su indicación como en su forma farmacéutica, a sus necesidades clínicas, en las dosis correspondientes a sus requisitos individuales, durante un período de tiempo adecuado y al menor coste posible para ellos y para la comunidad».
Este proceso, comprende la prescripción apropiada, la disponibilidad oportuna de medicamentos eficaces, seguros y de calidad comprobada, y velar por alcanzar la mejor relación costo-beneficio, en condiciones de conservación, almacenamiento, dispensación y administración.
Fármacos y medicamentos
Un fármaco o principio activo es una sustancia con la capacidad de interactuar con el organismo, el cual se utiliza con fines diagnósticos, terapéuticos o de prevención.
Por su parte, un medicamento contiene uno o mas principios activos, con un conjunto de sustancias, llamadas excipientes, que permiten la adecuada manipulación y administración para que el mismo llegue a su sitio de acción en el organismo.
Los medicamentos son formulaciones elaboradas en laboratorios industriales que cumplen ciertas especificaciones técnicas que aseguran su calidad, eficacia y seguridad.
Usos de los medicamentos
Podemos decir que los medicamentos tienen la capacidad de prevenir, aliviar, controlar, diagnosticar o curar algunas enfermedades o síntomas.
Prevenir: la prevención es una estrategia básica de la medicina, evita que se desarrollen enfermedades, de esta manera disminuyen los gastos de curar y tratar, lo que permite ahorra recursos y esfuerzos. Un ejemplo de prevención de los medicamentos es el uso de las vacunas.
Aliviar: existen medicamentos que se utilizan para aliviar ciertas molestias de algunas enfermedades que se manifiestan a través de signos y síntomas.
Controlar: en la actualidad hay enfermedades que no tienen cura, así mismo, existen otras enfermedades de larga duración (enfermedades crónicas); en estos casos los medicamentos que se indican contribuyen a controlar el avance o progresión de las enfermedades.
Diagnóstico: algunos medicamentos se utilizan para el diagnóstico de enfermedades, por ejemplo, para visualizar determinadas partes del organismo tales como los medios de contraste que se emplean en pruebas radiológicas.
Curar: el termino “curar” hace referencia a eliminar la causa de la enfermedad permitiendo se restablezca la salud de un individuo. Un ejemplo oportuno de esta característica de los medicamentos son los antibióticos, los cuales permiten combatir las infecciones bacterianas.
Efectos de los medicamentos
De forma general los efectos de un medicamento pueden clasificarse principalmente como efectos deseados, efectos adversos y efectos tóxicos.
Los efectos deseados son los efectos que se desean cuando se administra un determinado medicamento, por ejemplo, disminuir la presión arterial en pacientes con hipertensión o el control de los niveles de glucosa en pacientes con tratamiento hipoglucemiante.
Los efectos adversos, comprenden otros efectos que se pueden presentar cuando se administra el medicamento y que pueden alterar el bienestar de la persona. La intensidad de los efectos puede depender tanto de la dosis administrada como del tiempo de administración, la sensibilidad de la persona, la situación que enfrenta y la presencia de otros medicamentos, entre otros.
Los efectos tóxicos se observan generalmente cuando los fármacos son administrados en dosis superiores a las recomendadas para el tratamiento de distintas enfermedades. Pueden ser del mismo tipo que los efectos deseados o los efectos adversos, pero con mayor intensidad o gravedad.
Sugerencias sobre el uso de los medicamentos
La relación con los medicamentos puede producir dos facetas contradictorias:
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- Una de ellas es la bondad o beneficio de su uso por las razones correctas y en la forma adecuada. Aunque se presenten efectos adversos, el balance final resulta en efectos beneficiosos para la salud.
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- La otra faceta se manifiesta en los daños o perjuicios que puede provocar el uso injustificado, no fundamentado, no indicado o en condiciones inapropiadas.
Situaciones generadoras del uso no adecuado de los medicamentos
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- Autodiagnóstico, es decir que las mismas personas determinen cual es el problema de salud que les afecta. Cualquier solución que se busque a un problema mal identificado, es una mala solución.
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- La elección de un medicamento no indicado por el médico, para una enfermedad bien diagnosticada. No se ha optado por la solución correcta.
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- Cuando un paciente decide utilizar un medicamento para tratar una enfermedad que es parecida o igual a la que ha presentado una persona conocida. Es importante que tanto el diagnóstico como el tratamiento sean individualizados.
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- La opción personal de realizar tratamientos preventivos sin el asesoramiento y conceptos básicos necesarios para realizarlo con seguridad.
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- Cuando, lejos de lo indicado por el médico, los pacientes se apartan de alguno de los elementos recomendados en cuanto a la dosis a cumplir, horario establecido, la duración del tratamiento o en cuanto a su relación con las comidas, otros medicamentos o hierbas medicinales.
Un elemento importante, es satisfacer las necesidades de asesoramiento o abordaje de las dudas que es posible se presenten a la hora de abordar un tratamiento con medicamentos por un lapso breve o extendido.
Además, hay que considerar la influencia que tiene sobre nosotros la publicidad, en el caso de los medicamentos de venta libre. Muchas veces las personas se sienten inducidas a pensar que los medicamentos con agradables imágenes son los mejores para sanar de forma instantánea nuestro problemas de salud.
Por ello, se requiere que los pacientes adopten una actitud de atención adecuada, confianza y precaución ante una necesidad eventual de abordar un tratamiento que comprenda medicamentos, a fin de obtener de ellos el máximo beneficio sin adicionar perjuicios por nuestros descuidos, errores o desconocimiento. Por otra parte, se requiere que el personal de salud asuma con responsabilidad, ética y profesionalismo la atención de salud y la función de informar a las personas acerca de las mejores conductas y actitudes con relación a su autocuidado y especialmente en lo referido al uso racional de los medicamentos.
Referencias
1. Promoción del uso racional de los medicamentos. Disponible en: https://www.who.int/activities/promoting-rational-use-of-medicines#:~:text=Rational%20use%20of%20medicines%20requires,to%20them%20and%20their%20community .
2. Farmacovigilancia, desafíos en el uso racional de los medicamentos. Disponible en: https://elglobal.es/farmacia/desafios-en-el-uso-racional-de-los-medicamentos-y-la-farmacovigilancia/
3. Uso racional de medicamentos: una tarea de todos. Disponible en: https://www.minsal.cl/portal/url/item/8da19e5eac7b8164e04001011e012993.pdf
